
El epico fluir del tiempo espacio,
es similar a un rio que fluye desde su naciente
hacia el mar, donde todo se hunde en sus memorias.
Las tétricas lloviznas lo desbordan cada día,
haciéndolo crecer por dentro y por fuera.
Mi mirada se pierde entre mi yo y mi será,
no volveré a ser lo que fui para siempre,
porque de eso se tratan las mutaciones,
de cambiar hasta no dar más, y así me iré,
fluyendo en mi rio, ahogado en mis aguas,
nadando hasta caer en mi mar, donde partiré
junto a mi esencia hacia otro mundo donde
alimentare con mis amores, frustraciones, deseos,
besos, abrazos, caricias, palabras, poemas, demoras, llegadas,
partidas, canciones, sonidos, blasfemias, memorias y yos,
a los seres que alguna vez me alimentaron a mí, y será
lo que yo fui y no lo que yo quiera, me iré como viví y
quizás jamás despabile amores, ni contagie sueños,
ni florezca jazmines por no poder ser lo que quise ser para ellas,
cuando pude y no llegue a mi mismo con mi
estrionica figura danzando entre soles que no brillan,
abandonando estas frases como el rio que llego para ir
donde dicen debo ser.
No hay comentarios:
Publicar un comentario